(Mucho se ha comentado la aparente declaración de intenciones tras la decisión de abrir este disco de retorno con una pieza titulada Been Away Too Long. La portada del álbum, no obstante, se nos antoja menos anecdótica, bastante más sugeridora…) Cual deidad pagana y primigenia que acaba de escapar a una prisión de hielo (bienvenido sea el cambio climático, por una vez), Soundgarden ha regresado no exactamente donde lo dejó y sí un par de peldaños por debajo. Son buenas noticias. Porque, si Superunknown inició la deriva comercial que llevó a Chris Cornell y compañía a extraviar el sentido apenas un trabajo más tarde, este King Animal nos devuelve razonablemente a los tiempos de Badmotorfinger. Palabras mayores que cobrarían dimensiones cercanas a las del original si, junto a la excelente forma que gasta la banda, la producción de Adam Kasper hubiera optado por caminos menos nítidos. Pero no cabe queja sobre este meditado deshielo: el culto continúa.
(Esta reseña apareció en el número de enero de Go Mag.)
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