1. No es la ópera magna a la que Axl aspiraba. Tampoco, ni de lejos, la hecatombe que muchos intuían (y que las demos que venían circulando por Internet hacían prever).
2. Es, de lejos, lo más interesante que ningún componente de la formación original de Guns haya hecho hasta ahora. Cierto es que el listón no se encontraba particularmente alto, pero algún medio disco de Velvet Revolver resultaba decente y los proyectos paralelos de Duff han llenado de punk muchas tardes ladradoras-crepusculares.
3. Es una especie de Moby Dick redactado por Philip K. Dick: se puede disfrutar pero pasar a defenderlo requiere de mucho sentido del humor y un espectacular entendimiento del alma humana.
4. Es una maravillosa cápsula de tiempo: todo lo que ha sucedido musicalmente en Estados Unidos durante los últimos quince años se encuentra ahí dentro, de algún modo perverso y desastrado.
5. Tiene momentos nefastos (la primera pausa –y consiguiente cambio de ritmo- de Shackler’s Revenge) y otros ciertamente discutibles (la ampulosidad dramática de This Is Love), pero también hay instantes que merecerían figurar en una selección de lo mejor de los Use Your Illusion (la primera estrofa de Better, sin ir más lejos).
6. Es lo mejor que podía sucederle a Axl: ahora que se ha quitado el mamotreto de encima, quizá lo próximo sea un buen disco “normal”.
7. (No obstante) Comparado con los Use Your Illusion, resulta sintomático de un proceso esquizofrénico que empeora al galope.
2. Es, de lejos, lo más interesante que ningún componente de la formación original de Guns haya hecho hasta ahora. Cierto es que el listón no se encontraba particularmente alto, pero algún medio disco de Velvet Revolver resultaba decente y los proyectos paralelos de Duff han llenado de punk muchas tardes ladradoras-crepusculares.
3. Es una especie de Moby Dick redactado por Philip K. Dick: se puede disfrutar pero pasar a defenderlo requiere de mucho sentido del humor y un espectacular entendimiento del alma humana.
4. Es una maravillosa cápsula de tiempo: todo lo que ha sucedido musicalmente en Estados Unidos durante los últimos quince años se encuentra ahí dentro, de algún modo perverso y desastrado.
5. Tiene momentos nefastos (la primera pausa –y consiguiente cambio de ritmo- de Shackler’s Revenge) y otros ciertamente discutibles (la ampulosidad dramática de This Is Love), pero también hay instantes que merecerían figurar en una selección de lo mejor de los Use Your Illusion (la primera estrofa de Better, sin ir más lejos).
6. Es lo mejor que podía sucederle a Axl: ahora que se ha quitado el mamotreto de encima, quizá lo próximo sea un buen disco “normal”.
7. (No obstante) Comparado con los Use Your Illusion, resulta sintomático de un proceso esquizofrénico que empeora al galope.
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