Dice Josep Lluís Carod Rovira, en una entrevista publicada ayer por El País, que "quien condenó a muerte al tripartito fue Zapatero el 21 de enero de 2006", y que "Maragall ha ejecutado la sentencia el 11 de mayo de 2006".
Tranquiliza, pues, constatar que a ERC el paso por el Gobierno de la Generalitat le ha servido de algo. Porque, más allá de la irresponsabilidad y el infantilismo que han marcado su gestión, los republicanos parecen haberse aprendido al dedillo la principal regla del buen (mal) político: la culpa es siempre de los otros.
Así, cuando se le interroga por el idealista pero poco práctico (y en ocasiones nefasto) asamblearismo por el que se rige su organización, Carod Rovira contesta: "¿Este es el problema profundo que tiene Catalunya? ¿No preocupa por ejemplo que el secretario general de CIU se entere por la radio de que su presidente se está entrevistando con el del Gobierno español y haciéndonos la cama a los catalanes? ¿Eso no es un problema de democracia? ¿El problema es que la gente, los militantes, digan lo que piensan o que mande uno?"
Tranquiliza, pues, constatar que a ERC el paso por el Gobierno de la Generalitat le ha servido de algo. Porque, más allá de la irresponsabilidad y el infantilismo que han marcado su gestión, los republicanos parecen haberse aprendido al dedillo la principal regla del buen (mal) político: la culpa es siempre de los otros.
Así, cuando se le interroga por el idealista pero poco práctico (y en ocasiones nefasto) asamblearismo por el que se rige su organización, Carod Rovira contesta: "¿Este es el problema profundo que tiene Catalunya? ¿No preocupa por ejemplo que el secretario general de CIU se entere por la radio de que su presidente se está entrevistando con el del Gobierno español y haciéndonos la cama a los catalanes? ¿Eso no es un problema de democracia? ¿El problema es que la gente, los militantes, digan lo que piensan o que mande uno?"
No hay comentarios:
Publicar un comentario