It's not over yet!

Tras la victoria angelina de esta madrugada (103-98), a Boston le basta aún con ganar uno de los dos últimos partidos en casa para conseguir el anillo. Los Lakers deberían dar una doble campanada cuando ningún equipo ha logrado antes remontar un 1-3 en las finales de la NBA. Hasta ahí, la obviedad. Algo más allá, el sueño: un sexto encuentro a cara de perro para forzar la lotería del séptimo. It's almost over, just almost...